La empresa achaca al consistorio sus pérdidas económicas por permitir construir chalés y prohibir luego su ocupación.
Una constructora ilicitana ha interpuesto un recurso Contencioso-administrativo contra el Ayuntamiento de Aspe por los perjuicios económicos que le ha causado la prohibición de ocupar las nuevas viviendas de la urbanización Montesol, orden impuesta por el gobierno local al suspender las licencias de primera ocupación de los inmuebles. Las dos fases de bungalows construidas por esta empresa permanece deshabitadas por orden municipal tras haberse producido numerosos derrumbes en los terrenos sobre los que se asienta este complejo residencial.
Fuentes próximas a la constructora explicaron que el recurso interpuesto ante un juzgado de lo Contencioso-administrativo de Alicante reclama la responsabilidad patrimonial del Ayuntamiento sobre las pérdidas de la empresa, ya que la constructora "no puede entregar la promoción de viviendas que construyó con autorización del mismo Ayuntamiento que ha paralizado la entrega de licencias de primera ocupación". Sin estos documentos, las viviendas de obra nueva no reciben suministro eléctrico, gas, agua o línea telefónica y en muchos casos impide al promotor formalizar el contrato de compraventa con los futuros propietarios. Para esta empresa, toda la promoción se ha convertido en un foco de deudas a los constructores y demandas de los compradores.
Las citadas fuentes culpan al consistorio aspense por "haber autorizado la construcción" en los terrenos de Montesol "sin disponer de los informes geotécnicos necesarios". La consecuencia de estas irregularidades en la tramitación de las obras se ha traducido en varios derrumbamientos de taludes que han forzado el desalojo de la urbanización en varias ocasiones. La empresa ilicitana se ha sumado al recurso conjunto de los vecinos de la fase habitada y los propietarios de los terrenos colindantes para reclamar la responsabilidad del Ayuntamiento, aunque también ha demandado al consistorio en un procedimiento individual.
Una constructora ilicitana ha interpuesto un recurso Contencioso-administrativo contra el Ayuntamiento de Aspe por los perjuicios económicos que le ha causado la prohibición de ocupar las nuevas viviendas de la urbanización Montesol, orden impuesta por el gobierno local al suspender las licencias de primera ocupación de los inmuebles. Las dos fases de bungalows construidas por esta empresa permanece deshabitadas por orden municipal tras haberse producido numerosos derrumbes en los terrenos sobre los que se asienta este complejo residencial.
Fuentes próximas a la constructora explicaron que el recurso interpuesto ante un juzgado de lo Contencioso-administrativo de Alicante reclama la responsabilidad patrimonial del Ayuntamiento sobre las pérdidas de la empresa, ya que la constructora "no puede entregar la promoción de viviendas que construyó con autorización del mismo Ayuntamiento que ha paralizado la entrega de licencias de primera ocupación". Sin estos documentos, las viviendas de obra nueva no reciben suministro eléctrico, gas, agua o línea telefónica y en muchos casos impide al promotor formalizar el contrato de compraventa con los futuros propietarios. Para esta empresa, toda la promoción se ha convertido en un foco de deudas a los constructores y demandas de los compradores.
Las citadas fuentes culpan al consistorio aspense por "haber autorizado la construcción" en los terrenos de Montesol "sin disponer de los informes geotécnicos necesarios". La consecuencia de estas irregularidades en la tramitación de las obras se ha traducido en varios derrumbamientos de taludes que han forzado el desalojo de la urbanización en varias ocasiones. La empresa ilicitana se ha sumado al recurso conjunto de los vecinos de la fase habitada y los propietarios de los terrenos colindantes para reclamar la responsabilidad del Ayuntamiento, aunque también ha demandado al consistorio en un procedimiento individual.
Fuente: Diario Información
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